La energía e inspiración del Congreso Mundial de ASSITEJ en La Habana me ha causado una impresión duradera. ASSITEJ Cuba y tantos otros han hecho un trabajo tremendo creando y acogiendo el XXI Congreso Mundial de ASSITEJ. Fue una experiencia increíble en muchos sentidos. Pero, sin el tiempo, el dinero, la superación de obstáculos y el coraje que tantos delegados invirtieron en su viaje a La Habana, no habría Congreso. Creo que uno de los mayores puntos fuertes de la red ASSITEJ es que tantos miembros dan mucho de sí mismos, tanto desde su capacidad profesional como desde su corazón.
Hoy es mi primer día de oficina en un lugar nuevo. Mi compañía de teatro, Spektra, acaba de mudarse a un nuevo espacio junto con otra pequeña compañía aquí en Kristiansand. Hasta ahora, nuestra oficina han sido las mesas de nuestra cocina o una cafetería. Hemos entrado y salido de locales de ensayo y nos hemos alejado del centro de la ciudad para ir al almacén que hemos alquilado. Es increíble tener por fin un lugar propio, con un pequeño estudio, una cocina y un almacén (por supuesto, ya está lleno). Ahora mismo, parece que todo es posible. El aire está cargado de potencial (y de polvo, el lugar aún necesita mucho trabajo…).
El espacio se llama Lunta. Literalmente significa La Mecha, pero en noruego, la palabra suena bastante suave y cálida cuando se pronuncia. La contradicción encaja perfectamente con el espacio. Aquí es donde haré mi trabajo de Spektra, mi trabajo de ASSITEJ Noruega y, a partir de ahora, mi trabajo del CE. Mi primera reunión del Comité Ejecutivo es dentro de un mes, y estoy deseando empezar a trabajar de verdad. Lunta es nuevo, estar en el CE es nuevo, y 2024 parece ser un año lleno de cambios para mí. Me encanta y lo temo al mismo tiempo.
La energía e inspiración del Congreso Mundial de ASSITEJ en La Habana me ha causado una impresión duradera. ASSITEJ Cuba y tantos otros han hecho un trabajo tremendo creando y acogiendo el XXI Congreso Mundial de ASSITEJ. Fue una experiencia increíble en muchos sentidos. Pero, sin el tiempo, el dinero, la superación de obstáculos y el coraje que tantos delegados invirtieron en su viaje a La Habana, no habría Congreso. Creo que uno de los mayores puntos fuertes de la red ASSITEJ es que tantos miembros dan mucho de sí mismos, tanto desde su capacidad profesional como desde su corazón.
Al igual que la gigantesca red global necesita que seamos colaboradores activos, las pequeñas redes también. Pueden ser redes de seguridad. Un compañero de trabajo, un amigo, un compañero de vida o un colega que te conoce a ti y al trabajo que haces. Una cosa que me ha enseñado este último año es el valor de una red de seguridad. Tanto tener una como serlo. Cuando realmente necesitas una red de seguridad, la red global no puede darte un abrazo y decirte que todo va a ir bien, sin siquiera pronunciar las palabras. Esta introducción de boletín es un recordatorio para mí mismo, y quizá para ti también si lo necesitas: recuerda cuidar de las pequeñas redes de seguridad. Y después, sumérgete en el océano de posibilidades que puede ofrecerte la red ASSITEJ. ¡Nos vemos allí!
